El mundo de los envases take away

Hace años que ante la disyuntiva entre cocinar en casa o salir a comer fuera existe una tercera alternativa: pedir comida a domicilio. Una variante que los consumidores agradecen especialmente cuando las fuerzas tras una semana de intenso trabajo flaquean y no hay tiempo o demasiadas ganas de complicarse la vida en la cocina. Son esos pequeños ‘homenajes’ en forma de pizzas, comida asiática u otro tipo de especialidades que acerca hasta casa un mensajero dentro de distintos tipos de envases take away. Pero, ¿cómo están regulados los envases take away? ¿Cómo asegurarnos de que cumplen con la normativa vigente? ¿Qué se debe hacer con ellos una vez consumido el producto de cara a su posterior reciclaje? En este post vamos a analizar algunas de las claves que rodean el mundo de los envases take away.

 

El mundo de los envases take away

 

Auge de los envases take away

 

La cuestión de los envases take away cobra especial relevancia una vez que, en poco tiempo, han pasado de constituir un elemento residual o de consumo ocasional en los hogares a una de las principales vías de venta de comida tanto en el canal HORECA como en supermercados y tiendas de alimentos. El virus de la Covid-19 ha sido uno de los principales responsables de este crecimiento sin precedentes en el consumo de comida para llevar y, en consecuencia, de envases take away. Y es que, durante los largos meses de pandemia, con sus restricciones de movilidad y distancia social, el delivery fue la tabla de salvación para muchos restaurantes que solo así pudieron seguir operando y manteniendo a flote su negocio.

 

Como resultado, se produjo un salto exponencial en la cantidad de establecimientos que incorporaron a su oferta el servicio de entrega a domicilio. Según datos del informe Insights Delivery Horeca en España, elaborado por Delectatech, si en enero de 2019, en las vísperas del inicio de la pandemia, el porcentaje de establecimientos de hostelería que ofrecían estos servicios de delivery o take away era aproximadamente del 11%, en diciembre de 2021 esta cifra había alcanzado un 30,2% (+172%), con picos en las grandes capitales como Madrid y Barcelona del 45,87% y el 43,35%, respectivamente.

 

Respecto al tipo de negocios, pizzerías, comida asiática, hamburgueserías o bocaterías han seguido dominando el mercado, pero a estos delivery más tradicionales se han ido sumando otro tipo de restaurantes menos acostumbrados a sacar sus platos fuera de los límites de sus propios locales: arrocerías, braserías, tapas y hasta restaurantes de alta gama se están sumando también a la ola del negocio para llevar. En cuanto a la manera de llevar los alimentos hasta el domicilio del cliente, un 31,6% de los restaurantes cuentan con su propio servicio de reparto, mientras que 68,4% restante lo hacen a través de alguna de las distintas plataformas de delivery que operan en el mercado.

 

Envases take away: qué dice la Ley

 

El auge de los envases take away ha provocado, entre otras cosas, que estos hayan entrado de lleno en las distintas normas que regulan los envases en España. Así, la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular, establece que a partir del 1 de enero de 2023  ningún comercio podrá proporcionar a sus consumidores ningún plástico de un solo uso, incluyendo en esa categoría (tal como recoge en su anexo IV), aquellos recipientes para alimentos elaborados con este material, “tales como cajas, con o sin tapa, utilizados con el fin de contener alimentos que están destinados al consumo inmediato, in situ o para llevar”. Además, a partir del 1 de enero de 2023, se deberá cobrar un precio por cada uno de los productos de plástico incluidos en la parte A del anexo IV que se entregue al consumidor, diferenciándolo en el ticket de venta.

 

El aún más reciente proyecto de Ley de Prevención de las Pérdidas y el Desperdicio Alimentario, aprobado el pasado 7 de junio en Consejo de ministros y actualmente en fase de tramitación parlamentaria, también hace referencia a los envases take away. Concretamente, en su artículo 8 establece que:

 

“Los agentes de la cadena alimentaria que sean empresas de la hostelería y otros proveedores de servicios alimentarios tendrán la obligación de facilitar al consumidor que pueda llevarse, sin coste adicional alguno distinto, en su caso, del mencionado en el párrafo siguiente, los alimentos que no haya consumido, salvo en los formatos de servicio de bufé libre o similares donde la disponibilidad de comida no está limitada, así como informar de esta posibilidad de forma clara y visible en el propio establecimiento, preferentemente en la carta o el menú”.

 

“Para ello se emplearán envases aptos para el uso alimentario, reutilizables, o fácilmente reciclables. Para los envases o recipientes alimentarios de plástico de un solo uso deberá tenerse en cuenta las disposiciones previstas en el título V de la Ley 7/2022, de 8 de abril, en especial las relativas a la necesidad de reducir su consumo de cara a cumplir los objetivos del artículo 55.1 de dicha ley y a la obligación de su cobro”.

 

Esta Ley entrará en vigor a partir del 2 de enero de 2023.

 

Características de los envases take away

 

Además de estos requerimientos legales, también es conveniente que los envases take away cumplan una serie de requisitos para cumplir a la perfección con la misión para la que han sido concebidos. Algunos de ellos son:

 

  • Protección e higiene. Los envases han de estar hechos con materiales aptos para uso alimentario, de manera que eviten mermas o fugas durante su transporte.

 

  • Ligereza. Han de ser ligeros para facilitar su transporte y reducir las emisiones de Co2 asociadas al mismo.

 

  • Ergonómicos. Han de ser fácilmente transportables y manipulables por el cliente con sus manos.

 

  • Espacio interior. Lo ideal es que el envase se adapte al tamaño y forma del aumento para el que está destinado, de manera que se optimice al máximo el espacio.

 

  • Informativos. Pueden aprovechar su exterior para rotular en ellos información y promoción acerca del producto o el establecimiento y/o marca responsable del mismo.

 

  • Apilables. Para facilitar su transporte y almacenamiento.

 

  • Reciclables: Los envases deben estar fabricados con materiales reciclables. Y, si es posible, deben ser monomateriales para facilitar su separación y reciclaje.

 

  • Aptos para microondas. En caso de que el plato necesite ser recalentado.

 

  • Aislamiento térmico. Factor esencial para mantener la cadena de frío.

 

El mundo de los envases take away

 

Tipos de envases take away

 

El auge de la comida para llevar ha hecho que las compañías, tanto de hostelería como los comercios que venden comida para llevar, tengan que desarrollar envases take away que no solo cumplan con los requerimientos legales y de seguridad alimentaria, sino que también se ajusten a los parámetros sostenibles que el público demanda. Surge entonces toda una línea de packaging para llevar que incluye:

 

  • Bolsas de papel. Una opción reciclable y ecológica para llevar alimentos que además ofrece buenos niveles de resistencia.

 

  • Envases de cartón kraft. El cartón kraft es considerado el rey del delivery. Es el material con el que se fabrican muchas cajas para pizza y otros alimentos. Es ligero, económico, resistente, fácil de manejar, transportar y almacenar y también reciclable.

 

  • Poliestireno expandido (EPS). Los envases hechos a partir de esta resina plástica expansible tienen una elevada capacidad de aislamiento térmico y absorción de impactos. Son ligeros, impermeables, duraderos y reciclables.

 

  • Envases de aluminio con tapa. Son ligeros y con excelentes propiedades para evitar derramamientos, los efectos de la contaminación o pérdidas de temperatura. Se depositan en el contenedor amarillo.

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